El ciberbullying es uno de los problemas a los que pueden estar expuestos los adolescentes y niños. Por ello, es importante reflexionar sobre, cómo hay que actuar y qué se puede hacer.

Los medios de comunicación hoy en día han abierto posibilidades de conexión inimaginables, en donde una publicación en unos minutos pueda dar la vuelta al mundo, sin ningún tipo de censura o control. Esto puede ser de gran utilidad cuando tenemos un familiar lejos, pero una gran arma cuando se le quiere hacer daño a alguien.

Desde la psicología, cuando se trata con jóvenes y adolescentes la prevención del ciberacoso, se hace hincapié en lo siguiente:

• Acoger cualquier tipo de inquietud o situación que algún joven pueda manifestar en relación con las redes sociales.
• Incentivar que en caso de situaciones complejas no responda con amenazas o provocaciones, eso alimentará más el problema.
• Pedir ayuda a padres y/o profesores. En ocasiones a las jóvenes les puede dar vergüenza o inseguridad acudir a un adulto a explicarles la situación.
• Fomentar espacios de dialogo para hablar sobre los riesgos de las RR.SS y cómo pueden aminorarlos, por ejemplo, monitoreo de sus cuentas, mejorar la privacidad, conversar sobre qué cosas se pueden subir o decir y cuales no.
• Manejar el tiempo que se le dedica a las redes sociales. Emplear el tiempo libre en hacer actividades placenteras con gente que comparta gustos e intereses. Dosificar el uso de Internet y tratar que el computador esté situados a la vista de padres. Esto no quiere decir que actúen como policías, pero sí como guía de la educación de sus hijos.

El papel de los padres en la prevención del ciberbullying

Los padres muchas veces notan algunos cambios en sus hijos que pueden dar luces que algo está ocurriendo, por ejemplo: conductas inusuales, irritabilidad, retraído, hermetismo, cambios de grupo de amigos, aislamiento, cambios en hábitos de sueño o alimentación entre otros.

Es por ello por lo que es importante que ante cualquier cambio que noten en sus hijos, abran un espacio de conversación, en un clima de confianza y entregándoles el mensaje que los padres son incondicionales para ellos y están para ayudarles en su camino hacia la adultez. Es muy importante que el joven se sienta escuchado y con la posibilidad de hablar sin juicios.

Por medio de la buena comunicación y buen vinculo con los hijos/as desarrollamos uno de los factores protectores más importantes frente a cualquier situación complicada o de ciberacoso.